Cómo obtener un préstamo bancario siendo beneficiario de la DACA: la guía completa
Por lo general, para los beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) es difícil obtener préstamos bancarios, pero es posible. Muchos bancos y prestamistas los consideran personas de alto riesgo debido a su estatus. Muchos bancos consideran que la DACA es temporal y no está garantizada, porque las leyes de inmigración de EE. UU. afectan fácilmente a la DACA. Sin embargo, los beneficiarios de la DACA pueden obtener préstamos de otros prestamistas. Puedes obtener préstamos personales, préstamos estudiantiles y préstamos hipotecarios en los bancos y con otros prestamistas. Este artículo explica cómo obtener préstamos personales, préstamos estudiantiles y préstamos hipotecarios como beneficiario de la DACA.
Written by Jonathan Petts.
Written May 26, 2022
¿Qué tipo de préstamos pueden obtener los beneficiarios de la DACA?
A partir del gobierno de Obama, los beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés) pueden permanecer en Estados Unidos y acceder a un permiso de trabajo, a una licencia de conducir y a un número de seguro social. A pesar de esto, la obtención de préstamos bancarios sigue siendo muy difícil para los Soñadores, que son considerados prestatarios de alto riesgo.
Sin embargo, todavía hay algunas opciones de préstamo. Los beneficiarios de la DACA son elegibles para préstamos personales, préstamos estudiantiles y préstamos hipotecarios. Tus posibilidades de obtener un préstamo con éxito dependen de tu “estatus de riesgo” o del riesgo que representes como prestatario o prestataria.
¿Los beneficiarios de la DACA pueden obtener préstamos personales?
Por lo general, los beneficiarios de la DACA tienen acceso a préstamos personales. Los préstamos personales son préstamos que se otorgan para cualquier propósito personal. Por ejemplo, es posible que quieras financiar los costos de la matrícula universitaria o reparaciones de la casa.
Sin embargo, muchos prestamistas consideran que los préstamos a beneficiarios de la DACA son un gran riesgo. Debido a que la ley y el estatus del programa de DACA podrían cambiar en cualquier momento, existe el riesgo de que el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés) pueda deportarte en el futuro. El banco tendría dificultades para recuperar su dinero, si eso sucediera.
Además, muchos Soñadores no tienen los documentos requeridos o no tienen un historial de crédito significativo. Muchos también carecen de un aval o de alguien dispuesto a garantizar el pago, si no pueden pagar su préstamo. Los bancos no suelen estar dispuestos a prestar a los beneficiarios de la DACA. Sin embargo, otros prestamistas privados podrían estar más dispuestos a aprobar tu solicitud de préstamo.
¿Los beneficiarios de la DACA pueden obtener préstamos bancarios para la educación?
Los beneficiarios del programa de DACA no califican para recibir apoyo financiero federal ni para préstamos estudiantiles federales. Pero hay opciones alternativas de ayuda financiera que podrías explorar.
Los estudiantes indocumentados pueden acceder a las tasas estatales de matrícula en ciertos estados, como Nueva York, Florida e Illinois. La universidad puede pedirte que llenes la Solicitud gratuita de ayuda federal para estudiantes (FAFSA, por sus siglas en inglés) para ver si el Departamento de Educación del estado o la universidad misma te pueden otorgar ayuda financiera.
Dependiendo del estatus de residencia, ciertos estados como California, Connecticut y Minesota tienen programas de ayuda financiera específicos para Soñadores. Debes comunicarte con la oficina de ayuda financiera de la universidad para preguntar sobre tu elegibilidad. También podrías comenzar a buscar becas para inmigrantes indocumentados en la escuela secundaria.
Además, algunos prestamistas y universidades consideran a los estudiantes beneficiarios de la DACA como estudiantes internacionales. Si este es el caso, podrías obtener asistencia financiera para estudiantes internacionales, como becas privadas o préstamos estudiantiles privados. Sin embargo, las instituciones financieras pueden considerar los préstamos estudiantiles para beneficiarios de la DACA como préstamos “alternativos”, lo que podría generar tasas de interés más elevadas.
Considera cuidadosamente los términos de pago de cualquier préstamo que tomes, como el monto del préstamo, la tasa de interés, si es fija o variable, los costos mensuales del pago, las comisiones por apertura y las opciones de cargo automático.
¿Los beneficiarios de la DACA pueden obtener préstamos hipotecarios?
Los beneficiarios de la DACA son elegibles para préstamos hipotecarios. A menudo, los bancos tradicionales no aprobarán tu solicitud, pero hay opciones alternativas.
Una opción es un préstamo de la Administración Federal de Vivienda (FHA, por sus siglas en inglés) diseñado explícitamente para Soñadores. Hay cuatro requisitos para calificar como residente no permanente:
La propiedad que estás financiando con el préstamo debe ser tu residencia principal.
Debes tener un número de seguro social (SSN, por sus siglas en inglés) válido.
Debes cumplir con los otros requisitos generales para otorgar un préstamo a personas con ciudadanía estadounidense.
Tienes que tener un documento de autorización de empleo (EAD) del USCIS para demostrar que cuentas con un permiso para trabajar en Estados Unidos.
También podrías intentar obtener un préstamo de un prestamista privado. Estos préstamos suelen tener menos requisitos de documentación. Sin embargo, probablemente esperarán una calificación crediticia mínima de 650.
¿Qué necesitas presentar para obtener una hipoteca como beneficiario de la DACA?
Para solicitar una hipoteca como beneficiario de la DACA, tendrás que presentar estos tres documentos:
Tu número de seguro social.
Tu tarjeta de EAD anterior vencida, porque los prestamistas asumen que el USCIS renovará tu estatus para la DACA.
Tu tarjeta de EAD vigente del USCIS.
También tendrás que probar que tienes un ingreso estable y mostrar un estado de cuenta para demostrar que puedes permitirte comprar una casa.